En las organizaciones y empresas, a partir de las funciones, los roles o las políticas, entre otros elementos, se fragua la cultura.¿Qué es posible y qué no en una organización? Lo que se premia y lo que se visibiliza evidencia explícitamente las prioridades.  Cuando no existen normas sociales claras, es el caldo de cultivo perfecto para comportamientos poco cooperativos, falta de cohesión y alineamiento, alta competitividad interna y que salga lo peor de las personas.

Nuestra visión:

Alinear con valores permite que se establezca una base en la forma de actuar que queremos que tenga la organización.

• Los valores deben ser un eje vertebrador y no unos meros slogans.
• No todas las personas comulgarán con todos los valores. Es necesario hacer un ejercicio para saber qué valores crean afinidad en qué personas y cuáles crean tensión.
• Las personas que abanderan un valor son las que velaran por que sea un comportamiento real.
• Quien abandera un valor debe calibrar también su intensidad y ver cuando es más o menos oportuno para generar la mínima tensión.
• Los Valores se pueden concretar en los equipos a través de “Contratos sociales”.